lunes, 11 de abril de 2016

Simplemente una historia (parte 27)

-Tranquilo, dijo una voz con calma bajando la arma, hice lo mismo y respire un poco para bajar los niveles de adrenalina que se habían disparado, lo mire un rato, él volví a mirar a Noemi , le acaricio el cabello y por ultimo le dio un beso en la frente, ella se estremeció un poco y al instante se escapo una pequeña sonrisa de sus labios.
-¿Que haces acá?, dije al final desapareciendo mi espada, él me sonrió levemente.
-Supe que despertó, necesitaba verla nuevamente, gracias por darle el motivo de volver, me dijo al final el ángel de la muerte.
-No he sido yo, si no Amanda que se lo ha dado, ella siempre sera protectora con los demás, dije al final volviéndome a sentarme en el sillón, él en cambio se sentó a los pies de la cama, seguía con la mirada clavada en ella, esa mirada reflejaba anhelo, amor y mucha tristeza, reflejaba mucho mas de lo que las palabras podrían ni siquiera decir.
-Has la pregunta, dijo al final, le sonreí levemente.
-Eres su hermano, supongo que debiese saber que sí y toda la historia, pero prefiero que me refresques mis recuerdos, dije acercándome a ellos y sentándome en la silla que estaba al lado de la cama. El ángel de la muerte cerro los ojos y comenzó a relatar la historia.
-Nací unos años antes que ella, al comienzo de todo, antes de que los humanos fueran puestos en la tierra, en el caos mismo de la creación, en donde demonios y ángeles peleaban por gobernar este mundo y los Dioses no lograban establecer su dominio para proteger al ser humano frágil e ingenuo, los ángeles eran creados desde los sentimientos de esos primeros humanos, nos daban familias, porque nosotros mismo no sabíamos lo que eramos, sin un Dios que nos guiara, debíamos ser designados a una tarea cuando estuviéramos listo para cumplirla, supongo que igual puede confundirte esta explicación, imagínate como un nacimiento de un niño humano, pequeños, frágiles, que lentamente crecen, es lo mismo con nosotros. Cuatro años después de mi nacimiento ella nació y fue designada a mi familia, fue lo mas hermoso que me paso cuando la tuve entre mis brazos, mis padres sonreían mucho y la sonrisa de ella me llenaba mi corazón y fue así como comenzamos a crecer a ser educados. la protegía mucho ella siempre fue frágil, delicada, un poco enfermiza, pero yo siempre estaba para ella, para cuidarla y ayudarla a superar sus metas, daría mi existencia por ella, Noemi poseía la mirada y corazón más inocente de todo, servicial, muy inteligente y la mejor hermana que cualquiera pudiera pedir, siempre con una sonrisa, a pesar de lo difícil de su existencia.
Pero a mis quince años me designaron mi misión, seria el encargado de recolectar las almas de los mortales, mi jerarquía cambiaría y pasaría a ser un ángel de primer nivel, son los ángeles cuya misión es única, su poder es apenas menor al de un Dios, no seria un ángel del montón y eso significaba separarme de mi familia, tuve que dejar a Noemi para ir a cumplir mi nueva misión, abrace tan fuerte a mi pequeña hermana la primera vez que me separe de ella. Volvía una vez al año a casa de visita, pedí volver siempre para el cumpleaños de ella, la vi creciendo de lejos, nunca perdió su esencia inocente, cada vez que me veía acercarme a casa corría a abrazarme fuerte y lo primeros que salían de mis labios era un feliz cumpleaños para ella, esos días los disfrutaba al máximo con ella, era feliz con mi hermana. Pero cuando fue el cumpleaños numero 15 de Noemi, ella no salio a recibirme como siempre, había estado con una mala sensación la que incremento cuando ella no apareció, solté mis cosas y entre corriendo a casa, gritando su nombre, pero no aprecio el que si fue mi padre con mi madre la que llevaba un pequeño niño en su brazos, cuando la vi corrí al cuarto de Noemi y sus cosas ya no estaban, no sabes el miedo que me invadió en esa ocasión, mire a mis padres pero ninguno de los dos fue capaz de sostener mi mirada, recorrí toda la casa ya no estaban las fotos de nosotros dos, mi cuarto igual estaba desarmado, era como si ninguno de los dos hubiéramos existido en esa familia, a los ángeles no nos quitaban la familia, solo algunos les era eliminado un hogar al que volver, yo sabia que a mi se me debió quitar mi familia cuando se me asigno mi misión pero ellos me dieron la opción de algunos días en casa, pero a Noemi no se le debió quitar la familia, a penas salio mi voz cuando le pregunte a mi padre por ella y él solo contesto que me fuera que este ya no era mi hogar y que no volviera a preguntar por quien había sido mi hermana, Sentí mi mundo derrumbarse, que había sido de mi hermana, mi pequeña luz, ¿Dónde estaba? , no me detendría hasta encontrarla.
Fragmento 1                 Fragmento 2
Fragmento 3                 Fragmento 4
Fragmento 5                 Fragmento 6
Fragmento 7                 Fragmento 8
Fragmento 9                  Fragmento 10
Fragmento 11                Fragmento 12
Fragmento 13                Fragmento 14
Fragmento 15                Fragmento 16
Fragmento 17                Fragmento 18
Fragmento 19                Fragmento 20
Fragmento 21                Fragmento 22
Fragmento 23                Fragmento 24
Fragmento 25                Fragmento 26



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