martes, 12 de agosto de 2014

Antes que sea tarde

Miro al cielo estrellado y sonrió levemente mientras recordaba aquella tarde.
Estaba sentada en una de las banca del parque esperando que el llegara, jugaba des preocupadamente con sus manos mirando a los niños jugando, en sus ojos había tristeza, pero en cuento el apareció una sonrisa se dibujo en sus labios y sus ojos brillaron de amor por aquel chico que hacia que su corazón latiera a mil por hora, el se acerco, venia con la cabeza baja, ella se levanto para saludarlo pero el se sentó sin ni siquiera mirarla, solo pronunciando un árido hola, ella se volvió a sentar en silencio a su lado.
-Como has estado, pregunto.
-Bien, contesto el secamente sin mirarla, ella le tomo el rostro he hizo que la viera pero el le quito la mano con un movimiento brusco, esos ojos demostraba enfado, molestia y su semblante estaba muy duro.
-No me mientas, que te paso, volvió a preguntar ella.
-No me vengas a fastidiar tu también es lo ultimo que necesito, mira que he venido aunque no tenia tiempo para ti, sabes que estoy muy ocupado con la universidad, que tengo problemas con mis compañeros, en el trabajo están despidiendo y si me echan arruinan mi futuro, seré un don nadie que nadie quiere y a nadie le importa, le grito el furioso, ella lo miro y sonrió levemente.
-No te centres en lo negativos, busca lo positivo, lucha por lo que quieres, lucha por tu futuro, por tus sueños, si te caes vuelve a levantarte y continua caminando, eres el único que puede encontrar sentido en su vida, dijo ella mirándolo a los ojos, pero a el le molesto aun mas esas palabras.
-Parece que no me entiendes, dijo furioso.
-Si te entiendo mas de lo que crees, por eso te lo digo si dejas que tus monstruos te ganen simplemente te destruirás y no quiero ver eso, tu estas echo para grande cosas, dijo ella, pero el se levanto molesto.
-Realmente eres tonta, entiende la vida no es de color de rosas, sabes esto se acaba aquí, no se que hago con una soñadora boba, que no ve la realidad, las cosas no son simple, ya no tengo tiempo para seguir escuchándote, le dijo mirándola furioso, ella se quedo sentada sin poder decir nada, el dio media vuelta y se marcho pero antes que estuviera mas lejos, ella le grito.
-Tu tienes que enfrentar a tus monstruos los demás no lo podemos hacer por ti.
Pero el continuo sin mirarla siquiera, ella lo contemplo alejarse entre la multitud de la gente del parque mientras que la primera lagrima corrió por su mejilla.
Lo que el no noto jamás por estar tan ocupado en el, era que ella siempre estuvo a su lado, levantándolo cada vez que caía, cada vez que decía que no valía para nada ella lo hacia darse cuenta de su error, pero el nunca se dio cuenta que la vida de la chica a la que había decidido llamar novia, estaba quebrándose en pedazo, había perdido a sus padre en los últimos meses en una accidente y vivía con su abuela que la odiaba, había tenido que dejar la universidad para poder trabajar y mantener a su abuela que se lo exigía y solo su compañía para ella era suficiente para seguir luchando por la vida, que era su luz, su fortaleza que a pesar que el no se diera cuenta el estaba asiendo su mundo nuevo, pero el nunca valoro lo que ella hacia, nunca se dio cuenta de su penas, nunca logro darse cuenta el grito de auxilio detrás de cada sonrisa.
Volvieron a rodar lagrimas por ese ángel que ella había sido, cerro los ojos y respiro para abrir los ojos para ver esas estrellas que iluminaba el cielo como aquella noche en que el la beso, que había paso con el tiempo para que el descuidara el amor que le había jurado en ese cielo estrellado, pensó.
-Yo siempre te amare y cuidare de ti, aunque no te des cuenta nunca, dijo la chica antes de lanzarse del edificio mas alto de la ciudad.




1 comentario:

  1. Un texto que tiene un significado muy profundo en el comportamiento de los dos protagonistas. Te confieso que el final no me ha gustado porque una persona como él, no merece que se abandone una lucha por ser mejor. Sin embargo, conozco bien la soledad del vacío y si a eso le sumamos la decepción por lo que creíamos nuestro apoyo, unas palabras fuera de lugar, un comportamiento que en ese momento no somos capaces de ver que está lleno de egoísmo, su decisión puede ser posible, aunque yo no aceptaré eso, tenemos que marcharnos el día que nos toque porque no haya más remedio y porque suceda algo inevitable.

    También tocas otro tema interesante, preciosa. Y es una historia que yo he vivido en primera persona. Hay gente llena de incoherencia en la vida. Supongo que todos hemos podido ser incoherentes en algún momento y yo lo he sido. Pero también resulta que en ocasiones, alguien que te dice que con lo mínimo es suficiente para tirar adelante, resulta finalmente que sólo es feliz cuando le llevas regalos y aprovecha la menor oportunidad para hacer crecer su armario, sus joyas y disminuir el espacio que compartís juntos. Y entonces, tú, que por el motivo que sea, no ves lo que ocurre, y trabajas más para que esa persona sonría, te ves en la situación de que te dice que no le prestas atención y le prestas atención, no consigue que sonría porque está demasiado ocupada mirando escaparates y pensando en ella misma cómo mejorar lo que tiene.

    Ocurre muchas más veces de las que pensamos cosas así. Y por eso defiendo tanto la coherencia entre lo que dices y lo que haces. No entenderé cómo la gente se empeña en aparentar humildad para luego hacer cosas de este tipo. ¿Qué pretenden? ¿Resultar espiritualmente elevado? ¿Y luego? ¿Fingir toda la vida o en el momento de que muestres tu cara verdadera todo se desmonte y desarme? Negar la importancia del dinero es otra postura absurda. Sin dinero, sin porvenir, no se puede avanzar. Aquí estoy, delante de un ordenador con una conexión a internet que pago todos los meses y el ordenador me costó una cantidad que también tuve que pagar. La diferencia entre esto y, por ejemplo, el chico de tu relato, es que yo teniendo las herramientas necesarias, las utilizo y no pienso en que mañana ha salido otra mejor. Y como tengo ese vacío cubierto, sí puedo disfrutar y compartir los sueños y las ensoñaciones, puedo apreciar cuando unos ojos dicen más de lo que hablan, cuando una palabra pide auxilio, y sobre todo, puedo actuar en el momento, porque no tengo en la mente la necesidad de más cosas que las que tengo para estar bien.

    Ella tuvo la desdicha de encontrar a alguien que no veía el mundo como ella y la desventaja de los soñadores, es que al final, las cosas les duelen más. Estoy seguro que si se hubiera quedado la azotea y no hubiese saltado, el futuro le hubiera puesto a alguien que sí hubiera visto su interior. Y ella podría haber sido testigo de que la arrogancia y el egoísmo de quien la abandonó sólo le ha dado soledad a su vida.

    Hermoso, muy hermoso, Inori_Sam. Enhorabuena.

    Un abrazo, bonita. Y que tengas un día lleno de cosas hermosas y sueños cumplidos.

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